sábado, 11 de febrero de 2012

Este sábado será tuyo

Celebrando San Valentin con coca-cola en los tobillos y pizza, ninguno cree en ese varón con pañales, pero lo celebraremos así, porque tú siempre eres feliz con pizza, por que yo sería feliz contigo. Te conocí en pocos minutos como nadie más ha llegado a conocerte, y los dos sabemos que nuestra unión será y hubiese sido única e irrepetible, no obstante, decidiste huir. Como dice Fito: “nunca es lo que pudo haber sido”

Y podrías haber sido el último gran amor de mi vida, o el eterno, el que me acompañara al final, pero no. Porque era demasiado bueno para ser real, porque era tan bueno que era algo incontrolable para ti, porque no podías sentirte poderosa conmigo, porque a mi lado eras una niña feliz, inocente y sonriente. Por eso decidiste huir, y yo me doy cabezazos contra la pared, contra la puerta de mi habitación, miles de llamadas perdidas mías y no contestabas porque estabas ocupada en correr.

Te engañas diciéndome que mejor así, porque de otra forma podrías haberme hecho daño. Nunca te has parado a pensar que es probable que el daño más grande sea aquel que no le ha dado tiempo a suceder.

Lo nuestro podría resumirse en un aborto de historia de amor. Abortaste de mí porque podía ser demasiado bueno o porqué podías hacerte demasiado daño y llueven excusas baratas aun a día de hoy. Y sigues huyendo, y yo sigo solo.

Y entonces leo, la ciudad.

Dijiste: "Iré a otra ciudad, iré a otro mar.
Otra ciudad ha de hallarse mejor que ésta.
Todo esfuerzo mío es una condena escrita;
y está mi corazón - como un cadáver - sepultado.
Mi espíritu hasta cuándo permanecerá en este marasmo.
Donde mis ojos vuelva, donde quiera que mire
oscuras ruinas de mi vida veo aquí,
donde tantos años pasé y destruí y perdí".
Nuevas tierras no hallarás, no hallarás otros mares.
La ciudad te seguirá. Vagarás
por las mismas calles. Y en los mismos barrios te harás viejo
y en estas mismas casas encanecerás.
Siempre llegarás a esta ciudad. Para otro lugar -no esperes-
no hay barco para ti, no hay camino.
Así como tu vida la arruinaste aquí
en este rincón pequeño, en toda tierra la destruiste.

2 comentarios:

  1. a veces las personas necesitan ser cobardes y hacerse daño a si mismas y a los demas, nosé porqué, supongo que porque son masoquistas...

    solo decir, que no eres el único de quien hullen, y si, podria haber sido mejor en mi caso, mucho mejor, y el lo sabe, pero ya sabes... a la gente a veces, parece que le asusta la felicidad.

    ResponderEliminar
  2. http://www.youtube.com/watch?v=meO_JpGzP6Y

    siempre me he sentido más cómoda huyendo

    ResponderEliminar