sábado, 12 de mayo de 2012

Escopetilla de plomos

Flasback: No me gustaban las casetas, no me gustaban los cacharritos, lo único que quería era sacar peluches tirando de la cuerdecita, disparar la escopetilla de plomos y pescar patos amarillos para ganar premios, yo quería cosas que mañana todavía estuvieran ahí, no pasar un mal rato en una estúpida atracción que solo hacía que tuviera ganas de vomitar y llorar, ni escuchar música flamenca o versiones rancias de los hits del verano. Con lo que costaba una atracción podía pescar 5 patos o disparar 3 veces con la escopetilla o hasta sacar un peluche grande de la cuerda. Pues todo el jodido mundo estaba dispuesto a gastarse 100.000 pesetas en comida rancia de caseta con tierra y en cacharritos absurdos donde lo mejor que podía pasarte era no acabar muerto. Pues todas esas mierdas, para todo el mundo eran una opción mejor que gastarse 200 pesetas en dejarme tirar de una puta cuerda para poder pasarme el miserable día de feria jugando con un puto peluche.

En mi habitación tengo un peluche que conseguí tirando aros a un palo. Porcierto, no lo consegui en la feria, me lo gané en Isla Mágica.

1 comentario:

  1. O sea que tu eres de esos niños repelentes que solo quieren peluches. ¿Tu sabes el porculo que da tener que llevar el puto peluche media feria?

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