sábado, 31 de diciembre de 2011

He alcanzado el Zen

Ese estado de perfección meditativa, la iluminación. Todo lo que se necesita en la vida para ser feliz. Esa “sabiduría”. He alcanzado el Zen.

No sé, pero al menos de momento, o al menos ahora estoy completamente feliz y es una sensación que parece que no puede acabarse. Porque como me dijo ella: Lo que tenga que ser será. Y sí es así, para que voy a preocuparme, si solo vivo hasta mañana, mañana solo será el final ¿y que? Si a quien quiero que me quiera no me quiere, pues no me quiere y si me quiere, que me quiera hasta que tenga que quererme y si me quiere y se lo calla porque tiene miedo, que tenga todo el miedo que necesite, los sentimientos, no se tienen por gusto, si no por necesidad. Y si necesita tener miedo, algo bueno sacará de ahí. Yo necesito quererla y la quiero. Y si me quiere sin miedo, mejor, y si no me quiere, también mejor. Cada puerta abierta son cien puertas cerradas y cada puerta cerrada son cien puertas más abiertas por cada puerta. El mundo es inmenso, aterrador y horrible. Sí, es cierto, horrible, despreciable, si quieres llámalo injusto. Pero ella un día me dijo: Lo que tenga que ser será. Y estaba llorando de felicidad.

¿Qué mal puede haber a la vuelta de la esquina, para que necesites no ser feliz?

Sea lo que sea, era lo que tenía que ser, era inevitable y no cabía otra posibilidad y si había otra posibilidad no se dio. Y ahora, tienes cien puertas cerradas y cien puertas más abiertas por cada puerta cerrada. Diez mil puertas abiertas no están nada mal.

Así que... sí estás mal, recuerda, que estas así porque lo necesitas. Y eso es bueno.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Ella

Ella es la chica más especial de todos los tiempos. La única, la inimaginable, la inigualable, la perfección, sencillamente la mejor, nunca, jamás, en la historia de todo el universo conocido conoceré a una chica mejor que ella. ¡Nunca! Lo siento por todas aquellas que creen que son especiales, podéis ser muy especiales, geniales, increíbles, fabulosas, pero nunca lo seréis tanto como ella.

¿Cómo no amarla? ¿Cómo no desearla? ¿Cómo no querer morir por ella? ¿Y cómo no vivir y ser feliz, sabiendo que ella existe y que a menudo, sonríe?

Ha pasado por mi cama, al menos de momento una única vez. No fue perfecto, pero para mí siempre será el mejor (aunque los tenga mejores) porque fue con ella.

Guardo en un cajón una foto suya y varios regalos, cuando estoy triste la miro y me siento algo mejor porque ella existe, y no quiero ni necesito que me quiera, me basta con saber que existe, que esta bien, nunca hemos sido pareja, ni lo seremos, por mucho que la ame, porque ella es como un amor platónico. La chica perfecta. Y por nada del mundo permitiría que la imagen que tengo de ella se rompiera, por eso no podría salir con ella y ella me quiere muchísimo como amigo.

Otro día seguiré hablando de ella, cuando lo necesite, porque a veces me siento mal y pensar en ella me hace sentir mejor. Feliz. Si le pasara algo me moriría.

Cuando me siento solo, o al final del camino, cuando noto que ya no hay vuelta atrás, que todo esta mal, cuando observo el mundo y sus catástrofes, y a las personas y sus defectos, y todo lo horrible que hay cuando miro mi propio sufrimiento, y en todas esas veces que en mi garganta siento que me atraganto en mierda y quiero morirme. Cuando esos duros y crueles momentos llegan, no se como lo hace, pero siempre ¡Siempre! aparece cuando quiero morirme; ella me ofrece su mano, yo la beso y su existencia me hace seguir.

sábado, 24 de diciembre de 2011

Encuestas 2011

Bueno, cuando empecé el blog y vi la opción de hacer encuestas, me encantó y decidí ponerme hacer encuestas. Cada una de las encuestas está basada en una de las entradas que he escrito en el blog. Imagino que alguno de vosotros se lo habrá imaginado. Aquí os dejo un resumen de los resultados:

  • Debería actualizar 2 veces por semana. (10 votos, 52%)
  • La culpa de los cuernos, recae sobre quien los pone. (8 votos, 29%)
  • A la hora de tener sexo con alguien con SIDA, solo lo harían si estuvieran enamorados de esa persona, que se lo tendrían que pensar y que no directamente, empate con:13 votos (30%)
  • Se masturban muy a menudo (con 24 votos un 64%)
  • Que tienen muy claro lo que quieren en su futuro (con 10 votos el 34%)
  • El mínimo para que no se considere pederastia es de 16 años (con 12 votos un 40%)
  • Que la mayor infidelidad esta en cualquier mentira (con 8 votos 34%)
  • Que se odian más a si mismos. (con 5 votos 29%)
  • Se disfruta más duchandose: Todos los días, cuando se queda con alguien que te gusta, despues de follar y cuando uno siente que da asco. Empate con 3 votos (18%)
También estaba pensando que si alguien quiere proponer alguna encuesta para el año que entra o para cualquier momento, en la sección de comentarios podéis dejar la sugerencia. Para el año que viene espero tener tiempo de grabar Historias de cama en video o al menos leer dramatizadamente mis entradas por mí.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Yo también he sido el Doctor

El Doctor Who es una serie que me encanta, tanto que en menos de dos semanas me he visto dos temporadas y unos ocho capítulos y antes de acostarme esta noche serán dos temporadas y nueve capítulos, y eso solo de la serie actual, de la anterior, la primera, la de 1963 me he visto ya tres capítulos. Y los que me quedan... La primera vez que la vi pensé: Todo esto es increíble y también dudaba entre si lo que estaba viendo era una genialidad brillante o una gran estupidez absurda.

Os la recomiendo, porque, parece que no... pero es sobretodo impactante y tremendamente realista. ¿Realista? Preguntareis los que la conozcáis, sí, así es: realista.

Es cierto alienígenas y ciencia ficción y viajes en el tiempo y un espacio inmenso dentro de un espacio muy pequeño y todo eso, pero lo que cuenta es el mensaje, el otro día soñé que era El Doctor. Tal vez viaje en el tiempo y cuente lo que soñé pero lo mejor está en que me sentí como él cuando amanecí, fue una extraña comparación la que tuvo lugar en mi mente...

Definitivamente tengo que viajar atrás en el tiempo, recomendaros que veáis la serie para que entendáis porque yo también he sido el Doctor Who. Mi cabina, la TARDIS, es mi habitación, mi mente es el corazón de la TARDIS, y yo era el doctor. Al igual que el Doctor soy el último de mi especie, y me siento solo a menudo y viajo a todos los mundos increíblemente diferentes y distintos, que son, en el fondo: iguales. Así como lo es en la realidad cada una de las personas con las que me cruzo cuando salgo de la TARDIS y en la TARDIS he viajado con muchas compañeras, están Rose, Marta, Susan... Aunque en mi vida tenían otros nombres. Todas ellas diferentes e incluso yo mismo cada vez que me sentía morir era un Doctor diferente, como en la serie. He visto al igual que él lo peor y lo mejor de la raza humana, me he enfrentado a parásitos y visto amaneceres increíbles y he tenido que resolver todos mis problemas con ingenio y al igual que él, echo de menos a la última viajera que tuve en la TARDIS y sé que la siguiente no podrá sustituirla y ni siquiera intento que la sustituya, sencillamente necesito una compañera porque al final del día, después de cada viaje, lo que todos necesitamos es una mano, una mano a la que estrechar, y saber que puedes confiar en esa persona.

sábado, 17 de diciembre de 2011

¡¡Fuego!!

En esta historia yo no estaba presenté, y mi cama vuelve a ser la protagonista de nuevo. Yo concretamente estaba calentando, preparándome físicamente para la asignatura de acrobacias cuando desde la ventana de clase a unos 3 Km. de mi casa veía llover.

¿Y...? Hace tiempo cambié la cama de sitio. Debajo de la ventana, me preocupa que se moje la cama, sí, pero más me preocupaba: el enchufe. Justo debajo de la ventana y al lado de la cama está el enchufe. Que me dejará la ventana abierta fue motivo de mi preocupación. Si el agua entra en el enchufe... si el enchufe explota, si saltan chispas a la cama que está llena de ropa y si esta empieza arder...

Todo el dormitorio en llamas y nadie allí para apagarlo.

Mira el lado bueno, me dijeron: “Como no estás allí durmiendo, si eso pasa, tú, no morirás envuelto en llamas.” Yo contesté: “Eso es cierto. Pero si no me despertase a tiempo para salvarme y muriese, no me preocuparía quedarme sin casa”

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Rayada en el Water

Hace unos años, mientras cagaba, tuve una sensación extraña... no sé porque pero me dio la sensación de que había viajado atrás en el tiempo, no sé si fue así, lo que sí sé, es que le dije a una chica, en realidad he viajado atrás en el tiempo para casarme contigo. No me case con ella. Una noche la pasé en mi cama pensando: ¿para qué habría viajado yo atrás en el tiempo a este punto? No lo sé.

Lo que sí sé, es que he vuelto a viajar atrás en el tiempo otra vez, está vez con el pijama puesto y me he dicho: Recomiéndales a tus lectores que vean algunos capítulos del Doctor Who.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Pero vamos a ver...

¿¡Que clase de imbécil soy!? Enamorándome tanto, todos los días, de chicas que ni conozco, ni existen, ni conoceré, ni nada de nada... Y me dicen algunos: tío, tu follas mucho....

¿Mucho? como mucho con 30 o 40 o 50 mujeres... yo que sé... pongamos 20 redondeando hacia abajo para los envidiosos que lo hayan hecho menos que yo y no quieran sentirse mal... pero es que es irrelevante el número, da igual que fueran 2 o 327. Yo no quería acostarme con 2 o con 327, yo quería a una única chica perfecta y estupenda, para siempre, sin más vuelta de hoja... y aunque hubiesen sido 500 mujeres con las que hubiera acabado en la cama serían pocas. Porque me he enamorado de, al menos, 1633 mujeres y tampoco estoy diciendo que quiera sexo con 1633 mujeres que oye, si 1633 mujeres se ofrecen a que me las folle, tendré que aceptar, por bondad social, no porque yo quiera... Pero aunque me hubiese follado a 20.000 millones de mujeres ¿Qué más da? Yo era un triste romántico enamorado de la idea del amor, que acabo siendo un cínico gracioso y ninfómano. Yo no quiero a 1633 mujeres. Yo solo quiero a una. Una para siempre. Pero no sé donde está. Así que mientras la busco, seguirán acumulándose números, historias. Y sonriamos a la vida porque algunas historias son preciosas...

miércoles, 7 de diciembre de 2011

1000 historias de amor caducas.

Una vez más he vuelto a enamorarme como todos los días...

Casi me doy rabia a mí mismo, coraje, ira... Sí, porque estoy completamente enamorado de la idea del amor y cada día me enamoro de 3 o 4 veces al día, de mentira por supuesto pero me enamoro, me imagino un romance que empieza y nunca termina. Algo eterno, de verdad, amor de verdad. Amor, amor. Ese amor infinito que las personas envidian hasta la muerte pensando que es imposible que sea real. Pues ese y he puesto mil por poner algún número, estoy convencido de que me he enamorado aun más veces:

  • Al menos con 250 desconocidas me he cruzado por la calle y me he imaginado hablando con ellas y hacer que surja algo especial. Con 1 de ellas, esa imaginación se hizo real.
  • Al menos ¿Cuántas? 10 o 20 mujeres, pongamos 15 que he conocido en una fiesta o cafetería de forma casual que han acabado en mi cama. Y me he me imaginado que nos enamorábamos locamente. Con algunas de estas he tenido una conexión muy interesante.
  • Conocidas de amigas/os que me han presentado y me he imaginado que cupido lanzaba su flecha sobre nosotros... Al menos 100.
  • Un cruce de conversaciones ciber-espaciales, con masturbación mental, visual o telefónica, o tan solo una amistad algo “subida de tono” con quienes me imaginaba que acontecía una terrible ida de pinza y me empujaba a viajar Kilómetros a buscar a mi amada... Mínimo otras 50 o 100.
  • Y un montón de tías buenas que he visto en fotos de amigos de tuenti y me he imaginado muchas cosas (algunas muy pervertidas). Pongamos que han sido unas 1000 más.
  • Compañeras de trabajo, de estudios... 72. No espera esas eran las que tenía contadas cuando tenía 19 años... 6 años más tarde tienen que ser mínimo la mitad más pongamos por redondear que 100
  • Chicas que ni siquiera eran reales y que aparecían en mis sueños con las que me casaba, de seguro 50
  • Siete novias que imaginaba que durarían para toda la vida y se esfumaron como la espuma.
  • Un par de gordas con las que me imaginaba luchando codo con codo por nuestro amor, por culpa de la maldita sociedad de la imagen.
  • 3 menores de edad, con las que me imaginaba esperando, hasta poder amar en paz.
  • Y mas de 4 amigas que eran especiales que cada día con ellas las hacia más especiales.
  • Un único amor verdadero que jamás se acabará. Porque parece que no podrá ser.
  • Y otro amor que yo he elegido por el que lucho, para conseguir algo aunque se acabé.

1633 historias de amor de todo tipo, mas de las que podáis imaginar. Yo me las imaginaba en mi mente y ahora las recordaba, son más de las que recuerdo y de las que recordaré nunca. Pero casi siempre me imaginaba casándome, teniendo hijos y esas cosas que hacen que Ted Mosby necesite contar como conoció a la madre de sus hijos.

Y pienso, porque otra vez vuelven a pasarse por mi mente historias caducas de amor que nunca fueron ni serán. Pero...

sábado, 3 de diciembre de 2011

Ventana asesina

Ese día yo no estaba en mi cama, yo estaba en la escuela y había dejado a mi ornitorrinco durmiendo después de una larga, larga noche. No tenía ganas de estar en clase y bueno, me fui de clase, pensaba vaguear por ahí tirado cuando sonó el teléfono.

Tu ventana me ha golpeado en la cabeza con el pico y no paro de sangrar, ¿tienes algo que pueda echarme? Mercromina o algo...”

Se acabó el vaguear en ese momento empecé a correr deprisa de camino a mi casa, ains... mi pobre ornitorrinca que golpe se dio...